ARQUETIPOS ESCOLARES III

- El gigantón-pacífico: Dinosaurio herbívoro hiperdesarrollado. Pertenece a la familia de los saurópodos diplodócidos. De carácter afable y muy sociable el gigantón-pacífico es un niño muy querido entre sus compañeros. Nunca se rebota con nadie. Muy al contrario, es bastante pusilánime y es frecuente verlo amedrentarse delante del malote o el niño-pulga. Es extraordinariamente patoso pero... es muy alto y esta es la única razón de que acabe jugando en algún equipillo de baloncesto, balonmano o vóleibol. Pese a que es bastante feo y desproporcionado liga con mucha facilidad a partir de los 17 años. Qué verán las chicas en él...

- El nuevo: Niño que cambia de colegio cada año -a veces hasta dos veces en un mismo curso- por culpa del trabajo de su padre. El nuevo -que así es llamado por sus compañeros- es un niño problemático y conflictivo por culpa del trabajo de su padre. Nadie va a sus cumpleaños (ni siquiera su propia familia) por culpa del trabajo de su padre y nunca consigue integrarse en un círculo de amistades porque justo cuando los demás niños se dan cuenta de que se llama Michael, Michael tiene que marcharse a otra ciudad y todo por culpa del puto trabajo de su padre. Desde aquí queremos decirle al padre del nuevo que ya le vale porque debería ir a ver los partidos de béisbol de su hijo, asistir a las funciones de fin de curso y llevar al pequeño Michael al parque de atracciones de vez en cuando.

- El pijo o niño-rico: Odioso. El niño-rico siempre tiene los juguetes de moda antes que los demás. Es difícilmente tolerable después de Reyes porque se presenta en clase con sus nuevos y caros juguetes. Es el único niño que no reparte caramelos por su cumple, sino bolsas individuales de chucherías con regalo sorpresa. Por si fuera poco también celebra su santo. Aunque el pijo cae mal todos sus compañeros le hacen la pelota los días previos a su fiesta de cumpleaños porque tiene una casa con piscina, campo de futbito, la última videoconsola y una hermana mayor que está muy buena. Odioso.

- El cabezón o Frankestein: Ya sea por razones genéticas o por meningitis aguda el Frankestein posee una cabeza descomunal con campo gravitacional propio. Por donde pasa hay eclipse de sol y en su frente se pueden proyectar películas en cinemascope. Todo esto provoca que sus compañeros se mofen de él. Si supieran que, en apenas unos pocos años, este niño se convertirá en modelo o actor se burlarían aún más de él para compensar la tristeza de verle saliendo con la hermana mayor del niño-rico.

IMPORTANTE: La naturaleza es sabia y permite innumerables variables y cruces entre los distintos arquetipos, por lo que es habitual encontrarlos combinados en un mismo individuo. V. gr: el empollón-gafotas-enfermo, el pulga-malote, el moqui-vaca, el ligoncete-cabezón, el nuevo-mariquita... y así hasta el infinito.